Existe toda una leyenda romantica que dice como, a fines del siglo XIX, las personas se agolpaban en los muelles para enterarse que habia pasado con el personaje de Tienda de antiguedades, la gran novela de Charles Dickens. ¿Murio?, gritaban, ¿o sigue viva? Segun esa misma leyenda no fueron pocos los hombres y mujeres que, apresurados por tener su ejemplar -que traia un barco cada mes- se arrojaron al agua.
Esa situacion parece tan romantica como risueña vista desde el presente, un presente en el cual las personas solo parecen preocuparse por lo que sucede en las calles, por lo que sucede con los famosos a los cuales siguen y a quienes les importa poco y nada que hacen los escritores.
Y, como los adultos no leen, como sus padres no leen, como sus mayores no les dan un ejemplo, los niños tampoco leen. Esa es la realidad, una realidad cruel pero que, viendo las cifras de ventas, aparece claramente confirmada desde hace años sino decadas, decadas desde las cuales no nacen lectores nuevos.
Hoy, por supuesto, los niños no leen y se supone que no leen porque, a diferencia de Sartre (del Sartre niño, por supuesto), ellos no han encontrado un libro que les de esa sensacion de libertad, de alegria, de diversion del autor de Las manos sucias.
Creanos si le decimos que no es imposible: para lograr ese encomiable objetivo lo primero que debe hacerse es buscarse un titulo atractivo, una lectura que, desde el mas pequeño hasta el mas grande, pueda entender y disfrutar.
Harry Potter, dira mucha gente, cumplio ese objetivo, fue un libro que borro fronteras, que creo lectores y esta bien, la pregunta que deberia hacerse, sin embargo, es: ¿porque no leer un libro español? ¿Porque no comenzar a leer con un libro español?
Y no existe mejor opcion que los libros facsimiles de la España sagrada, una coleccion de titulos que permiten que todos los lectores se sientan atraidos porque es una historia llena de fuerza, de pasion y, mas que nada, de esperanza. A esto puede sumarse luego otra coleccion, la de los libros facsimiles de la Galicia Sagrada, ideal como complemento.
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